miércoles, 18 de noviembre de 2015

Reflexión otoñal

niebla


Hola guapas:

Ya nos falta un poco más de un mes para dejar atrás el otoño y que comience el invierno, con la Navidad y todas las sorpresas que nos traerá el nuevo año.

En mi caso, aunque me encanta el invierno, el otoño es la estación del año que más me gusta: no hace tanto calor como en verano ni tanto frío como en invierno y los bosques se tiñen de dorado. Además, aunque me molesta por el frizz, me encanta la niebla, el viento y el olor a hojas húmedas de las mañanas de otoño.

Sé que a muchas de vosotras (como a la mayoría de la gente) es posible que os parezca una estación triste, porque los árboles pierden sus hojas, pero, en mi opinión, es la época del año en que la naturaleza nos da una lección de cambio y superación.

blosque


Seguro que os preguntaréis "¿cómo?". 

Dejando atrás el pasado, lo que ya no le sirve (las hojas de los árboles) y preparándose para, tras un periodo de cambio y reflexión, volver a sacar lo mejor de sí misma (los brotes que nacerán en primavera).

Nosotras también podemos hacer lo mismo y, en mi caso, este año eso será intentar dejar atrás todos los hábitos que no me gustan (por ejemplo comer azúcar todos los días, descuidarme con la rutina de noche, no hacer ejercicio...) y cambiarlos por los que me gustaría tener para así poder empezar el año nuevo con hábitos nuevos y estando mucho más cerca de conseguir mis objetivos.


Por eso, en lugar de esperar al próximo año prefiero comenzar a cumplir los propósitos para el año nuevo en octubre. ¿Qué mejor momento para deshacernos de todo lo que no nos gusta que cuando el año se esta terminando para así poder empezar el Año Nuevo dejando atrás aquellas viejas costumbres que no nos gustaban para poder cambiarlas, poco a poco, por las que siempre hemos querido tener?

4 comentarios:

  1. Me ha encantado la entrada. Mi año también "empieza" en septiembre/octubre. Es la época en la que hago balance y procuro fijar objetivos para mejorar. En enero nada cambia para mí (salvo que en ese mes me hago más vieja :p). Preciosa la reflexión y preciosas las metáforas. Un besazo!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tu comentario guapa, me alegro mucho de que te haya gustado la entrada. Para mí enero también es un mes más, lo único que lo diferencia son las fiestas y que empezamos un año nuevo :)
      Besos!

      Eliminar
  2. Me ha gustado mucho tu reflexión, aunque yo odio el otoño y el invierno, no porque me parezcan estaciones tristes sino por el frío, que me sienta fatal, no estoy acostumbrada a estas temperaturas. Y en cuanto a los propósitos, la verdad es que aunque me los propongo en Año Nuevo al final no los cumplo, pero suelo proponerme retos en verano y esos sí que suelen tener final feliz, es curioso ^^
    Un beso!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tu comentario. Me alegro mucho de que te haya gustado la entrada, yo tampoco lograba cumplir los propósitos de Año Nuevo jajaja
      Besos!

      Eliminar